jueves, 19 de febrero de 2015

¿Se está perdiendo?

 
Da la impresión y creo que además es real que el espíritu de la Cuaresma Católica se está perdiendo y que las generaciones nuevas no saben ya lo que supone el tiempo cuaresmal previo a la Semana santa. Ayer fue Miércoles de Ceniza que se sigue celebrando en todas las parroquias, conventos, colegios religiosos católicos y por supuesto en todas las catedrales y en el Vaticano. Lo que se está perdiendo es el conocimiento de lo que es la cuaresma como tiempo de penitencia, ayuno y abstinencia como actualización de los ayunos voluntarios que hacía Jesús y los sufrimientos que tuvo que padecer los días previos a su muerte en la cruz por la redención y salvación de la humanidad y el perdón  de los pecados. Reconozco que no está de moda el sentido de culpa y de pecado que la Iglesia recalca en estos cuarenta días de penitencia, ya que el pecado para mucha gente y sobre todo para los jóvenes de hoy no existe. Podrán realizarse acciones buenas o malas con las consecuencias que se puedan derivar de ellas. Pero el pecado que tiene que ver con la ofensa que se hace a Dios por un acto malo, para muchos ya no tiene sentido puesto que viven al margen de Dios, no se puede ofender a alguien que no se le conoce ni cuente para la vida. Al perder fuerza la Fe en Dios pierde fuerza o anula el sentido de pecado. En tal caso la penitencia que la Iglesia predica y estimula en Cuaresma ya no tiene el menos sentido. Por más esfuerzos que hagan los sacerdotes, obispos y el mismo Papa, además de los religiosos y familias cristianas para impulsar la penitencia en estos días si no hay sentido de pecado y de ofensa a Dios no sirven para nada. Por otra parte, esta forma medieval de presentar la Cuaresma con la práctica del ayuno y la abstinencia de carne el miércoles de ceniza además de los viernes de cuaresma y el Viernes Santo, hoy ha perdido todo sentido como práctica medieval desfasada para el siglo XXI. En fin, lo cierto es que los tiempos cambian y que nuestra Iglesia hace que perduren formas de penitencia desfasados cuyo sentido se ha perdido, que la descreencia cada vez más fuerte que nos invade y el sentido de culpa de haber ofendido a Dios han desaparecido para mucha gente en el mundo entero lo que
 hace cada vez más difícil recuperar el significado que tiempos atrás tuvo la Cuaresma. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario