Descansar de un trabajo bastante agotador es necesario, desconectar unos días del trabajo diario también, es lo que está haciendo esos días Mª Eugenia. Para mi resulta un problema añadido puesto que la sustituta de ella, aunque tenga experiencia tiene una forma diferente de hacer las cosas y si no la tiene aún se complica más. Nos estamos defendiendo, van pasando los días sin demasiadas sorpresas, Mª del Carmen, por el momento, sigue bien y aun que el cuidado no es igual vamos saliendo del paso cada día. No son los mejores días para pedir descanso, por lo menos para mi, pero es lo que hay. Estando la madre y la tía de Mª Eugenia lo normal es que pidiera los días de navidad y año nuevo hasta Reyes para poder estar en familia, además unos amigos les han invitado a una casa rural con el fin de que el descanso les resulte más positivo y saludable. Ella se merece el descanso, además no había cogido vacaciones por lo que esos días le han venido como anillo al dedo. Los problemas son para mi, todo se complica algo más, he tenido que cambiar la forma de hacer las cosas, por ejemplo la compra diaria, una vez Mª del Carmen está en el Centro de Día ya más o menos todo sigue igual, pero por la mañana hasta las diez aproximadamente he de estar compartiendo con la sustituta levantarla, lavarla y estar más presente cuando le damos el desayuno. Tengo suerte de la cuidadora de fin de semana que viene por la mañana con el fin de ayudar a levantar y lavar a Mª del Carmen. Las tareas de la casa me preocupan menos pero los cuidados que hay que proporcionarle a ella hace que esté más preocupado por la falta de la cuidadora de siempre.
