El mes de noviembre que está a punto de terminar ha hecho un frío de invierno siendo otoño, carente de lluvias significativas en toda la Comunidad de Madrid aun que en otros lugares ha llovido más, se despide el mes sin lluvias importantes, estamos pasando una sequía considerable lo que repercute y mucho en la bajada de los embalses a un nivel preocupante, incluso los campos de secano no están produciendo los cereales habituales en los campos de Castilla, ayer me decía el podólogo al que fui que había estado en Salamanca la semana pasada, que lo que vio eran campos de cereales con poco grano y bastantes en barbecho. Si seguimos así será un mal año, demasiado seco, con embalses muy por debajo de su capacidad, restricciones para regadío y consumo, desertificación avanzando en una buena parte de España, me parece que ya hay un 75% de tierras desérticas, malas cosechas tanto de secano como se regadío, camiones cisterna que recorren bastantes pueblos por las restricciones que se han aplicado para el consumo humano, los humedales importantes de España como Daimiel secándose, por lo que afecta tanto a la fauna como a la flora de éstos y un etc. que nos viene a confirmar que el cambio climático es una realidad imparable aun que algunos políticos y otras personas lo nieguen.
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